Cuando Antonio Hernández Palacios recibió el encargo de ‘Los Cantos de Maldoror’ por parte de ‘Metal Hurlant’, estaba en uno de los puntos más altos de su carrera como historietista.
Compartía con ‘Mac Coy’, la exitosa serie para Dargaud, la realización de los álbumes sobre Eloy y la guerra civil española (Ikusager); además había sacado del congelador ‘El Cid’ con el objeto de ver hasta dónde podía llegar su nueva andadura.
El objetivo de los ‘Humanoides Asociados’ parecía ser publicar tres cantos en un álbum completo. Por motivos que desconocemos, la empresa no se llevó a feliz término y la serie quedó en su primer episodio. Fue publicado en su versión francesa en la revista ‘Metal Hurlant’ en 1981, y en el año siguiente lo seria en el número 11 de la versión española de la misma revista.
Indudablemente Hernández Palacios hizo lo que pudo y en lo personal quedó satisfecho de su trabajo (enseñaba con mimo exquisito a sus amistades más apreciadas las planchas originales), pero el tema original es de compleja transcripción al cómic, o simplemente a cualquier otro medio.
Isidore Ducasse, falso Conde de Lautréamont, nació en Montevideo en 1846 y murió 24 años más tarde, parece ser que de sífilis (lo que explica alguna de sus temáticas). Su escasa obra hubiera caído en el olvido de no ser porque los sub-realistas franceses le tomaron cariño y lo valoraron como antecedente, a nuestro juicio de forma exagerada. ‘Los Cantos de Maldoror’ es un libro inclasificable y quizás por ello mismo de muy difícil representación en lo gráfico, lo que incrementa el mérito de Palacios al afrontar el reto.
Hemos querido incluir en esta entrada la posibilidad de comparar la versión en color con el trabajo inicial en blanco y negro, pero dado que solo contamos con algunas planchas en este formato las ponemos separadas de las de color.
7 comentarios:
A nivel gráfico, los Cantos me parecen de una genialidad apabullante. ¡Qué maravilla!
La historia, en efecto, es extraña y complicada de trasladar al cómic.
¿Pero quién lo hubiera mejor que Palacios?
Es un gran Trabajo de Palacios!
Una maravilla. Y también una lástima que este artistazo como la copa de un pino no tenga el reconocimiento que merece en la actualidad. Deberían de haberse reeditado ya muchas de sus obras.
Moldoror(en el título)parece una mezcla del Mordor de Tolkien y el Maldoror de Lautréamont. :)
Dicho esto, interesante, como siempre, esta comparación color-blanco y negro. Gracias.
Buenísimas planchas de Palacios..
Tanto en blanco y negro como a color son increíbles.
JD
Es una obra de difícil transcripción, pero Palacios intento sacarlo adelante, aunque no no creemos que el éxito fuera completo.
Recibe un cordial saludo.
KRAUSTEX
Le hemos hecho algunos arreglillos para que quedara mejor que la edición española.
Recibe un cordial saludo.
MO SWEAT
Completamente de acuerdo.
Recibe un cordial saludo.
ANÓNIMO
Tienes razón. Gracias.
Recibe un cordial saludo.
ANGUX
Sentimos que haber podido incluir todas las de blanco y negro.
Mas adelante esperamos poner una interesante doble versión, BN y color, de Palacios.
Recibe un cordial saludo.
Tuve la fortuna de ver la versión en b/n de las primeras planchas y eran realmente impresionantes. Especialmente la de presentación, con la lápida tallada, la gárgola burlona y la imagen de la procesión funeraria de encapuchados, sacada directamente de la bellísima película El tesoro de Arne, del director sueco Mauritz Stiler.
Ya sé que llego tarde, pero es que estaba buscando datos sobre Antonio y me reencontré con vuestra entrada...
Un abrazo.
Publicar un comentario