19/3/09

LAS OCASIONES PERDIDAS DEL CÓMIC ESPAÑOL- ALMA DE DARGÓN

El llegar a realizar una obra coherente y de calidad, parece requerir en España, no solo unas cualidades artísticas fuera de serie, sino también una actitud de combate irrenunciable de la que no todo el mundo esta provisto. La vida tranquilita de muchos dibujantes belgas es lo que la mayor parte de los dibujantes españoles hubieran querido para si.

Hay países que nunca han tenido la más mínima posibilidad de ser una potencia en el cómic. No es el caso de España. Hubo un momento en que dispuso de una cohorte de autores extraordinaria en activo: Blasco, Palacios, Ambrós, Ibáñez, Víctor de la Fuente, Longarón, Clavé, Ortiz, Bermejo, Bielsa, Pardo, Fernando Fernández, Calatayud, Sió, Gimenez, Maroto, García, Jan, Font, Bernet …con veinte bastan, para que seguir. Todos jugaban en primera división y la mayor parte de ellos terminarían jugando en ligas foráneas y con un estilo de juego que no era el que les gustaba.


Este cartel de dibujantes de nivel extraordinario daba para mucho. Solo hubiera necesitado desarrollarse en una industria mínimamente en condiciones y haber podido realizar su trabajo de forma adecuada. No fue así, y a ello hemos querido dedicar una serie de artículos que hemos llamado ‘Las ocasiones perdidas del cómic español’. Los ámbitos del tema son diversos, se puede escoger un autor, una obra o una revista. En este caso hemos elegido una obra que se titula:
ALMA DE DRAGÓN
El caso de Esteban Maroto es muy particular y requeriría un análisis en profundad. Tan admirado como denostado, constituyó durante mucho tiempo una de las grandes esperanzas del cómic español. Con ‘5 X INFINITO’ demostró que estábamos ante un autor fuera de serie y recibió el espaldarazo norteamericano al obtener el premio de la Academia Norteamericana del Cómic (1970), en dura competencia con Gir y Bellamy.


Con tan buenos augurios, dio la sensación que íbamos a tener un autor contrastado a nivel internacional que posiblemente abriría el camino a otros. Lamentablemente no fue así, o por lo menos no en la medida y de la manera que nos hubiera gustado. Maroto durante algunos años nos ofreció páginas de una gran belleza, pero nunca llegó a pasar el corte de lo que suponía un trabajo mercenario.
Ahora, viajemos en el tiempo y vayamos al 1 de junio de 1972. Entonces, todo parecía posible para Esteban Maroto y para el cómic español. En su numero 39, Trinca (la mejor revista de cómic que ha habido en España) inició sin previo aviso una serie suya a caballo entre la ciencia ficción y la fantasía. Trataba de la invasión de un planeta por tropas alienígenas y de la resistencia que les opone una hermosa amazona guarnecida por sus poderes mágicos. El nombre de la protagonista era el mismo que el de la serie: ‘Alma de Dragon’. Después de varias entregas, el relato fue cancelado antes de su finalización por motivos que no vamos a recordar aquí. Lo que si recordamos, es que algunas de sus páginas siguen siendo de una belleza impresionante.



3 comentarios:

Jesús Duce dijo...

Sensacional Maroto.
Uno de los más grandes, sin duda.

Un cordial saludo

Manuel Deskartes dijo...

Curioso trabajo, pero quien es Charles Caum? ¿quien ha dado el color? no lo dices y siento curiosidad.
Un saludo.

HORACIO DIEZ dijo...

Gracias por tu comentario Jesús. Maroto es uno de los grandes sin duda y merece un estudio de su obra y aportes en más profundidad.

Hola Manuel. Charles Caum es el seudónimo de un amigo y colaborador, no se dedica profesionalmente a nada relacionado con este mundo de lo gráfico, y es el quien dio el color y restauro el negro. Todo ello de forma manual, sin ordenador, hace ya tiempo y ha querido ahora compartirlo con todos.

Un abrazo.