EL OESTE, EL CINE, LOS EUROPEOS Y LOS PRINTS NORTEAMERICANOS

PREVIO AL OESTE DE LOS EUROPEOS

Como ya anunciamos en la anterior entrada sobre el genial Toppi, hemos decidido abrir un nuevo tema en nuestro blog, en el que se traten las extraordinarias adaptaciones que ha hecho el cómic europeo sobre el género del Oeste.

Ilustración de Sergio Toppi para 'Ticonderoga'.

Pero antes de empezar con el cómic, creemos necesario hacer una entrada introductoria y valorativa sobre ‘que’ es eso que hemos convenido en llamar ‘Oeste’. De momento, intentando ampliar la visión que en general se tiene sobre los indios norteamericanos.

Detalle de 'Catch Pens' realizado por James Reynolds.

A lo largo de bastantes años se ha ido creando toda una épica, con una amplia galería de personajes, que ilustraban los acontecimientos que forjaron el país que ha sido más determinante en la historia del s. XX.

'Bernie Blackstone's old saddle' de James Bama.

Si bien el estereotipo ha reinado por doquier en el género, poco a poco, se fue intentando condensar una visión más apegada a lo real de la que aportaban las primeras interpretaciones que rondaban lo mitológico.

Lowell ha tocado el tema de la guerra civil norteamericana

 en numerosas ocasiones, un ejemplo de eso lo tenemos en esta 'Battle of the crater'.

Para empezar, hay que incidir en que los límites de eso que podríamos calificar de ‘Oeste’ son difusos. Por ejemplo, en el cine o la literatura ‘El último mohicano’ no está del todo claro si pertenecería al género y lo mismo ocurre con ‘Gringo viejo’ o con ‘Lo que el viento se llevó’.

Tres peliculas que tocan el género sin pertenecer completamente a él.

Lo que sí está claro, es que tanto en las películas, como en las novelas, los cómics o las series televisivas del Oeste, suelen haber ‘pieles rojas’, cuatreros, búfalos, sheriffs, diligencias, minas de oro, ‘saloones’ con chicas de ‘amplia moralidad’, bandidos, duelos al sol o a la sombra, trenes, el 7º de Caballería y algunas cosillas más. Suele haberlos, pero no siempre salen todas estas cuestiones, ni son tratadas de la misma forma.

Lovell toca el tema de la prostitución con los nuevos ricos de las minas de plata de 'Cripple Creek',

con un interesante acento en la soledad de la figura central 

De este enorme ‘magma’, el cine norteamericano ha sacado amplia tajada. Consecutivamente y a lo largo del tiempo se fueron generando dos formatos distintos, según lo que era percibido como ‘políticamente correcto’ en la mentalidad colectiva de la época correspondiente, sobre todo en relación a los indios

A Lovell le gusta poner el acento en lo anecdótico más que en lo dramático,

para demostrarlo presentamos el primer bosquejo en b/n y color de 'Invitation to trade',

el 'arte final' estaba todavia mejor hecho.

El primer formato se correspondería con la frase del general Philip O. Sheridan (tantas veces atribuida erróneamente al General Custer) sobre que ‘el único indio bueno, es el indio muerto’.

Un voluntario del cuerpo de 7º de Caballeria y una foto del Gral. Custer.

Es decir, que a los espectadores que acudían a ver las primeras películas del Oeste, les traía bastante ‘al fresco’ las valoraciones sobre las distintas culturas. Aplaudían a rabiar la llegada del 7º de Caballería y veían encantados cuando los indios caían en el tiro al blanco que practicaban los pioneros.

Las tropas auxiliares indias rindieron un notable servicio a los blancos norteamericanos. Terpning los ha representado en esta interesante pintura titulada 'Search for the renegades'.

Se aceptaba como normal la desaparición de los pobladores autóctonos del nuevo continente, pues eran un obstáculo para el avance del progreso. Y en otros frentes de tipo teórico, los historiadores anglosajones pasaban sobre el tema con mucho cuidado, no sin antes criticar severamente la colonización hispana (que no portuguesa) de América.

Lovell nos presenta esta cuidada 'Expedición de Coronado'.

En una segunda etapa, que se produjo a partir de mediados de los 60 del siglo pasado, los guionistas de cine se tomaron más interés por la verosimilitud del paisaje y del paisanaje, buscando una interpretación más ‘antropológica’ y poniendo velitas en distintas capillas, con la finalidad de hacer más comprensibles las claves de las guerras y conflictos que estuvieron presentes en la formación de los EEUU.

Los 'pies negros' representados con todo lujo documental por Lovell, siguiendo los datos e información aportados por la expedición de Lewis y Clark  en 1806. Detalle de 'Blackfeet Wall'.

Este cambio de posición vino determinado por algunos escritores norteamericanos, que tras un profundo y concienzudo análisis, determinaron con claridad las fases del exterminio físico y cultural de los habitantes originarios de las planicies y las montañas norteamericanas. Las revueltas indias de principio de los 70 (del siglo XX), servirían de caldo de cultivo de esta recapitulación.

Este 'Lider de hombres' indica claramente la profundidad de la mirada de Howard Terpning, no solo en lo documental, sino también en lo psicológico. Este trabajo fue realizado como estudio  para representar a miembros de la tribu Crow, el rostro del modelo utilizado fue un apache actual.

En una primera fase fueron los blancos, cada uno ayudado por sus acólitos indios, los que dirimirían su primacía en el Este. En las terroríficas guerras anglo-francesas, se establecería el pago por ‘scalpe’ o cabellera (el invento fue de los blancos y no de los indios) y se asentaría la preponderancia anglosajona en el norte del continente.

James Bama ha realizado trabajos anexos para el cine, como esta magnifica

 pintura de la película 'El último mohicano'.

Quizás la película que refleja mejor estos procesos sea ‘El último mohicano’, y en lo que respecta al cómic ningún autor norteamericano lo trataría convenientemente, pero en Europa Dino Battaglia y Hugo Pratt corporizarían la época como si la hubieran vivido.

Nuestros queridos Pratt y Battaglia profundamente interesados por la guerras franco-inglesas.

Después, y en la imparable marcha hacia el Oeste, se eliminaría el elemento básico para la subsistencia los indios, que no era otro sino el bisonte. Más de 60 millones de bisontes fueron masacrados en apenas 20 años. Los blancos elevarían a los altares a uno de los principales autores de esta atrocidad (Bufalo Bill) y lo pasearían por los circos del mundo entero entre gritos de admiración.

Bama realizó este fiel retrato de Buffalo Bill partiendo de fotos de época.

Poco importaría que los blancos pisotearan todos y cada uno de los tratados que fueron firmados con los indios (hombre blanco, lengua de serpiente), sin alimentos y con una tecnología y eficacia militar muy inferior a la de sus oponentes, su suerte estaba echada.

Frank C. McCarthy representó en varias pinturas el avance del 'progreso' y la caza del bisonte.

Para los indios el bisonte blanco era una manifestación del 'Gran Espíritu', el cazador que conseguia uno era considerado como un guerrero imbatible. La mutación es natural en todos los mamiferos y se produce 1 por cada 3.000.000 de individuos.

Pero antes de pasar a la trastienda de la historia, las tribus que habitaban el norte de América, darían nombres legendarios que aún perviven entre nosotros: Nube Roja, Toro Sentado, Gerónimo, Mangas Coloradas, Cochise y una larga lista de guerreros que dieron todo lo que tenían y más en la defensa de su pueblo y su forma de vida.

Detalle de 'Intruders' de James Reynolds.

'A strange sign' de James Reynolds.

'In the land of the winter hawk' de Frank C. McCarthy.

Serian las tribus menos dependientes del bisonte y con asimilación cultural hispana (apaches y seminolas),  los que darían las últimas y más épicas batallas, para terminar sucumbiendo ante el inexorable avance del ‘progreso’.

'Legend of Geronimo' de Terpning. El lider de los chiricaguas ha pasado a la historia como uno de los más impresionantes guerreros que han existido a pesar de su inferidoridad material frente a las tropas norteamericanos.

Los indios eran capaces de seguir y leer la huellas sin dificultas. y Howard Terning

de representarlos como si uno de ellos fuera.

'The sauvage taunt' de Frank C. McCarthy.

'Los Diablos' de Frank C. McCarthy. La inferioridad apache se compensaba con un inimaginable sentido del sacrificio personal en la batalla.

 

'Chased by the Devil' de Howard Terpning.

Pero todo esto no llegaría a la mentalidad y comprensión occidental hasta a mediados de los 60 (más de un siglo después de los sucesos originales). Esta nueva visión tendría sus consecuencias en el enfoque narrativo de los distintos medios audiovisuales.

'Walking Coyote and the buffalo orphans' de  Tom Lovell

Tom Lovell tenía predilección por imagenes impactantes, en 'The heirloom' nos cuenta una historia de la que desconocemos el principio y el final.

Howard Terpning realizó este fantástico y documentado 'Preparin for de sun dance', reflejando la ceremonia propiciatoria ejecutada por el pueblo comanche y algunos otros del medio Oeste. 

Las historias de ‘la fábrica de sueños’ ampliarían sus márgenes y ‘la cosa’ ya no giraría en torno de los simplones ‘buenos’ y ‘malos’, como había ocurrido hasta entonces.

'Children of the raven' de  Frank C. McCarthy.

En esta segunda etapa se intentará dar una mayor verosimilitud (su más claro precedente esta en ‘La diligencia’ de John Ford) y por primera vez se da una visión clara de los perdedores (‘Pequeño gran hombre’, ‘Bailando con lobos’, ‘La leyenda de Jeremy Johnson’… etc).

Peliculas norteamericanas que hicieron cambiar la mentalidad occidental respecto de los indios norteamericanos.

Hacemos esta pequeña introducción, para incidir sobre la influencia y concomitancia del cómic europeo con la interpretación cinematográfica norteamericana. Por lo menos y en lo que respecta a este tema, a los autores europeos de cómic les resultaron mucho muchísimo más sugerentes y estimulantes las diversas propuestas que hacia el 7º arte, que la versión absolutamente plana que daban sus compañeros de profesión del otro lado del Atlántico, basadas por lo general en una guardarropía que no existió, ni por asomo, en la realidad histórica.

Tipos indios retratados por Terpning en las reservas.

También se interesaron en profundidad los autores europeos por la verosimilitud de sus propuestas, para lo que se documentaron ampliamente, empezando por los grandes ilustradores norteamericanos coetáneos con el tiempo histórico en que sucedieron los hechos (Remington y Rusell) y terminando por los archivos históricos de USA, que no son poca cosa.

Dos pinturas de Rusell y Remington,  pintores norteamericanos casi contemporaneos con las culturas que deseaban retratar. 

En esa profundización terminaron por distinguir entre un comanche, un sioux, un apache o un cheyenne etc. A todo esto y como elemento propio añadirían una tonalidad más cruda que se basaba en el celuloide de finales de los 60, (Pekinpack y los ‘spaghetti western’ de Almeria), que primaba la faceta de la ‘salsa de tomate’ sobre cualquier otra cuestión.

Directores que dieron nuevos aportes al Oeste cinematográfico.

Con todo este bagaje, los autores de la vieja Europa se fueron alejando inequívocamente de los modelos de ‘Tom Mix’, ‘Red Ryder’, ‘Gene Autry’, ‘Hoppalong Cassidy’, ‘El llanero solitario’ y otros muchos héroes con características de tiradores infalibles, lo que evidentemente no quiere decir que muchos autores europeos no utilizaran el arquetipo para sus propios fines. Series como ‘Comanche’ o ‘Blueberry’ ampliaron el concepto a limites nunca vistos en Norteamerica.

Comanche y Lance, dos versiones distintas del Oeste a los dos lados del Atlántico,

pero igualmente buenas.  

En oposición con el cómic norteamericano, en el cómic europeo han existido al menos una docena de series (algunas completamente desconocidas en España), que tienen un enorme interés en lo grafico y en lo textual, además de un cuidado exquisito por la valoración de los más mínimos detalles de la época histórica que intentan retratar.

Jean Giraud (Gir) y Charlier hicieron la joya de la corona del comic europeo en lo que se refiere a la temática del Oeste.

 

Si bien los norteamericanos fracasaron en hacer comics del Oeste de altura, no en todos los terrenos les ocurrió lo mismo.

'Hombre medicina de los cheyennes' realizado por Terpning.

Este prólogo hemos decidido presentarlo con obras de ilustradores norteamericanos de series limitadas de reproducciones artísticas, también llamados ‘Prints’.

Bama y su predilección por los tipos que representan el antiguo Oeste.

Permitan pues un leve apunte sobre ellos, ya que hemos decidido utilizar sus pinturas para dar una idea apegada a lo real de los perdedores de la contienda que ampliaremos más adelante con otros protagonistas.

'Powwow Dancer' de James Bama.

Todos ellos tuvieron una carrera de ilustrador o pintor fuera de esta temática del Oeste, pero en ella encontraron su satisfacción personal y su triunfo económico en el mercado del arte.

La habilidad e Terpning para la captación de un instante puede verse en este 'Habla el Trueno'.

Hablamos en pasado porque casi todos fallecieron hace años a muy avanzada edad.

JAMES BAMA.-Reconocido ilustrador comercial , en el tema del Oeste se encuentra como pez en el agua, buscando casi siempre temas y personajes representativos. Utiliza el pincel a modo de microscopio y practica un severo hiperrealismo.

'Young plains indian' es una de las más bellas pinturas de Bama. 

FRANK C. McCARTHY.- Puso el énfasis en la dinámica y el movimiento. Adorna sus temáticas con arriesgadas perspectivas y enfoques inusuales.

McCarthy nos muestra la última gran victoria de los indios en 'Little Big Horn'.

TOM LOVELL.- Este extraordinario pintor e ilustrador, falleció con 88 años y una larga lista de galardones a sus espaldas. Sus ideas son casi siempre ocurrentes y procura ir más a lo anecdótico que a lo dramático de la confrontación entre culturas.

'Exploradores' de Tom Lovell.

JAMES REYNOLDS.- Su principal interés eran los vaqueros, las luces del amanecer en el Medio Oeste y la dura vida de transito que llevan. Sus indios, sin estar mal hechos, transmiten ecos de distancia.

Excelente pintura de Reynolds sobre los navajos en 'Leftovers'.

HOWARD TERPNIG.-Si un pintor ha sabido representar la esencia del alma de los primitivos habitantes de América, es él sin lugar a dudas. En lo artístico reúne unas cualidades técnicas fuera de lo común y cuenta con una frescura digna de ser más ampliamente reconocida.

'The staff carrier' de Howard Terpning.

Bien, después de este pequeño apunte ilustrativo, solo decir que hay más autores de este tipo y nosotros solo hemos escogido a los que hemos considerado mejores.

'Foot soldiers' utiliza un paisaje de Yellowstone como fondo. A Terpning le gustaba retratar no solo indios verosimiles, sino tambien lugares sugerentes.

Lo que sí está claro es que, parafraseando el discurso del jefe Seattle: ‘Vuestros caminos y los nuestros no son los mismo’.

'La ofrenda al sol' de Terpning representa la profunda simbiosis de los pueblos nativos norteamericanos con la Naturaleza.

Y de una forma bastante extraña el pensamiento indio ha sido dignificado en el cómic europeo. En una próxima entrada hablaremos del discurso ofrecido por el jefe Seattle y su versión en cómic realizada por Moebius.

Bama en 1990 realizó este 'Iroques' como regalo en edición limitada de uno de sus libros. 

Pero eso será más adelante, ahora celebremos las 200.000 entradas del blog, en la confianza de que esta introducción al tema les haya gustado.

                                                                                                                                       

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